sábado, 13 de abril de 2013

MUNDOS PARALELOS


 Por primera vez científicos logran un estado de superposición cuántica a un nivel observable por el ojo humano, abriendo un campo de posibilidades para aplicar la mecánica cuántica al mundo macroscópico.

Por primera vez científicos lograron llevar los bizarros efectos de la mecánica cuántica a escalas macroscópicas, observables por el ojo humano. A escala subatómica las partículas pueden estar en estados de superposición -ser ondas y a la vez partículas-, pueden comunicarse instantáneamente (entrelazamiento cuántico) o moverse de forma completamente impredecible. Este tipo de estados cuánticos podrían tener enormes aplicaciones tecnológicas si son logrados llevar a una escala macro.
El logro, reconocido por la revista Science como el más significativo del año, fue realizado por los físcos Andrew Cleland y John Martinis de la Universidad de California en Santa Barbara.Los científicos diseñaron una máquina que consiste de una pequeña placa de metal hecha de material semiconductor apenas visible para el ojo desnuda; al super enfríar el aparato justo encima del cero absoluto (menos 273C) y luego subiendo la energía por un “solo quantum”, hicieron que vibrara al hacerse más gruesa y más esbelta a una frecuencia de 6 mil millones de veces el segundo, produciendo una corriente eléctrica detectable. Lograron, también, que vibrara en dos estados energéticos al mismo tiempo, mucho y poco -un fenómeno sólo permitido por las leyes de la mecánica cuántica. Una especie de fusión de la dualidad, en la que un objeto podría tener mucha energía y a la vez poca, ser grande y pequeño o estar aquí y allá (o en el ejemplo clásico de Schrödinger: un gato que está vivo y muerto al mismo tiempo).
El físico Andre Cleland dijo sobre su resonador cuántico en estado de superposición: “el sistema está excitado y no excitado al mismo tiempo”, esto es, moviéndose y estacionario. “Esto no es lo mismo que la mitad de una excitación, ya que las excitaciones son indivisibles”.
Este aparato abre la puerta para llevar la moción cuántica a escalas superiores y explorar la pregunta fundamental de por qué los objetos de nuestra realidad cotidiana, como las monedas o las personas no se comportan de una forma cuántica observable. Muchos físicos creen que en teoría objetos muchos más grandes podrían ser colocados en estados cuánticos si pueden ser protegidos de perturbaciones del ambiente; otros creen que existe una ley aún no descubierta que impide que este comportamiento cuasi-mágico de la materia subatómica se refleje en los objetos de mayor tamaño. Sin embargo, la utilización de la mecánica cuántica en la computación y en las comunicaciones es altamente factible a escala de nanotecnología, lo que podría posibilitar estados de encriptación que no puedan ser hackeados, velocidad de procesamiento inmensamente superior al actual -donde una computadora puede estar tanto apagada como encendida- y posiblemente teleportar información a través del entrelazamiento cuántico.

Según explicó Andrew Cleland, director del equipo investigador, uno de los postulados básicos de la mecánica cuántica es la posibilidad de colocar un objeto en un “estado de superposición cuántica”.
“Se trata de estados en los que un mismo objeto está al mismo tiempo en dos lugares distintos, en dos configuraciones diferentes o, como en el famoso ejemplo del llamado gato de Schrödinger, a la vez muerto y vivo”, agregó el físico.
Todo eso es muy extraño y no se corresponde con la experiencia cotidiana, pero las pruebas experimentales efectuadas indican que es un fenómeno real tanto a escala subatómica como en los átomos e incluso en algunas moléculas de mayor tamaño como la molécula en forma de pelota C60 (carbono 60).
Según Cleland, hacía tiempo que se perseguía el objetivo de demostrar ese “efecto de superposición cuántica” en objetos de mayor tamaño con especial atención a los objetos mecánicos, en contraposición con los eléctricos.
Uno de los principales retos que se han encontrado los científicos es el de eliminar las vibraciones térmicas, que podrían ocultar o destruir el efecto cuántico.
El equipo de la universidad californiana logró su objetivo de llegar a la energía del punto cero, es decir a la energía más baja del sistema, que corresponde a su estado fundamental o estacionario.
Cleland y sus colegas demostraron “un estado de superposición cuántica” en un objeto que contiene billones de átomos, es decir en el mayor objeto mecánico en que ha podido observarse ese fenómeno hasta el momento.
El sistema mecánico utilizado es un disco finísimo capaz de vibrar mediante expansiones y contracciones en todas las direcciones y que han bautizado “tambor cuántico”.
La forma más fácil y clara de observar los efectos cuánticos es desembarazarse totalmente de las vibraciones térmicas, que podrían camuflar o destruir justamente el efecto que se trata de observar.
A temperatura ambiente, esas vibraciones térmicas pueden ser mil veces mayores que esos efectos cuánticos, por lo que hay que refrigerar el disco hasta temperaturas bajísimas: de dos centésimas de grado por encima del cero absoluto.
La temperatura necesaria está relacionada con la frecuencia de vibraciones del objeto que se trata de estudiar, y así un diapasón tendría que refrigerarse aún mucho más para llegar a la energía del punto cero (es decir el estado estacionario del sistema) o mínimo nivel de vibración posible.
Como eso es muy difícil, los científicos optaron por un “tambor cuántico” con una frecuencia vibratoria un millón de veces superior a la de un diapasón y con el que es posible llegar al estado estacionario rebajando la temperatura con los instrumentos actualmente disponibles en el mercado.
Cleland y sus colegas demostraron el estado fundamental del resonador mecánico utilizando un sistema electrónico conocido como “qubit” (bit cuántico), que permite medir el resonador sin destruir de paso los efectos cuánticos.
Así lograron verificar la ausencia de la mínima vibración, luego excitaron el resonador con un único fonón de energía vibratoria y finalmente crearon en él un “estado de superposición” de forma que en el resonador había simultáneamente una excitación y su ausencia y ése podía elegir entre uno u otro estado, algo parecido a escala mecánica al fenómeno del gato de Schrödinger.

jueves, 4 de abril de 2013

SEXO Y SEXUALIDAD


                                                                                                       

¿Qué sabemos del sexo y la sexualidad?
En las esferas superiores, sexo significa cualidades o características femeninas, positivas o negativas. Considerando que, en la Tierra puede haber sexo sin amor y en esos planos hay amor sin sexo.
Nuestro cuerpo funciona muchas veces como emisor y receptor. Es un amplificador de nuestros sentimientos, pero, siempre son más fuertes los sentimientos de orden terrenos.
La sexualidad es un estadio necesario del ser humano en determinadas fajas del universo.
Cuando Dios dibujó el cuerpo humano e incluyó en él los órganos sexuales, debía ser porque El lo consideraba necesario, y por tanto  santo. Nos sirve para procrear, para crear nueva vida y así de ese modo no podemos considerar que el sexo pueda ser inmoral. ¿Sino por qué Dios habría de crearlo? Lo inmoral es el abuso y el uso desequilibrado que se hace del sexo.
Todos nosotros, encarnados y desencarnados, estamos vivos, sentimos, gozamos, sufrimos y pensamos. Todos nosotros, cuando llega el momento del viaje al mundo de los Espíritus, viaje que a veces, sólo está a un paso de nuestro cuerpo o de nuestro ambiente familiar, llevamos consigo el equipaje que cargamos en nuestra última existencia y en vidas pasadas. Y en una inmensa mayoría de nosotros, el equipaje  está cargado de pasiones, vicios e inclinaciones inferiores. Es en muchas ocasiones que ese equipaje va lleno de desequilibrios de orden sexual.
Cuando trasponemos la frontera de la carne, nos encontramos que somos los mismos que cuando vivíamos en el cuerpo. Podemos sentir hambre, sed, frío y deseos sexuales que intentamos aplacar acercándonos a los humanos encarnados. Viviendo sus pasiones y sus prácticas sexuales, recreándose con lo que ven y sienten; a tal punto que desean  mezclarse con nosotros e incentivarnos sus deseos y su imaginación, para así, poder seguir gozando, más allá de la muerte física.
Hay muchos lugares en el mundo espiritual, muy cercanos a nosotros, Espíritus encarnados, e incluso, por debajo de la superficie terrestre, donde nuestros hermanos desencarnados se entregan con desenfreno y lujuria al sexo; son aquellos que en su vida física vivieron para y por los impulsos sexuales. Son hermanos desequilibrados, con una sola fijación mental; saciar su apetito sexual y, como los órganos sexuales, no desaparecen con la muerte del cuerpo, estos hermanos, viciados por su conducta inferior a través de los siglos, se representan en los planos inferiores, portando órganos sexuales descomunales en su periespíritu, de las aberraciones del pasado. Cargados de millones de gérmenes y microbios que les cubren los órganos. Su fijación secular les crea vibraciones que atraen o crean microorganismos del sexo.
Somos unos grandes ignorantes aún de todo lo concerniente a las cuestiones sexuales. El sexo es mucho más que unos órganos circunscrito a una parte determinada de nuestro cuerpo; sexo es energía procreadora, es fuerza creativa, es una carga emocional que, sublimada nos eleva, y rebajada nos ata a las pasiones y desequilibrios.
El sexo funciona, más allá de sus funciones normales, como freno a otras pasiones y violencias peores; de ahí que, tanto en el mundo físico, como el espiritual, se permitan ciertas prácticas. El sexo es un freno, y un mal que frena para no incurrir en crímenes más graves. El sexo es una válvula de escape a nuestra inferioridad.
Es durante el sueño que muchos encarnados viciados, buscan desesperadamente, la compañía de los Espíritus y viceversa, dominados por deseos inconfesables y se envuelven en prácticas inmorales: y, ¿por qué ocurre o cómo puede ocurrir esto? Porque nuestro cuerpo periespiritual está constituido de moléculas, que, a su vez, están constituidas de átomos y los átomos de elementos de gran potencia, algunos desconocidos aún en la Tierra. Esos cuerpos periespirituales se densifican o se sutilizan, según el grado moral del Espíritu; así vemos a estos hermanos desequilibrados, con cuerpos tan densificados, que se podrían confundir con cuerpos carnales.
El sexo desajustado, a veces, comienza con una mirada y a partir de ahí, el deseo crece y va en aumento a medida que la mente se recrea y construye escenas viciadas. En muchas ocasiones, lo que no somos capaces de hacer en la Tierra, durante el día, lo hacemos liberados del cuerpo, en el sueño. Buscamos en el más allá a los que piensan y sienten como nosotros, liberando nuestras represiones y mancillando nuestro Espíritu.
Hay en el mundo espiritual muchos seres con mutilaciones de todo tipo, a muchos, incluso, les faltan los órganos sexuales y, esto ocurre, por el ejercicio indiscriminado de la sexualidad. Las fuerzas electromagnéticas del cuerpo y del periespíritu tienden a debilitarse o a gastarse: en una palabra; se borran, y sólo a través de muchos siglos de sufrimiento y pruebas dolorosas, de grandes deformaciones en el cuerpo, es que se vuelve a construir los órganos que fueron disipados con el desequilibrio y la locura.
Todo en el Universo puede espiritualizarse o materializarse, dependiendo apenas de nuestra fijación mental. La mente; ese gran motor que construye y destruye.
Un Espíritu de luz, nos dice: El sexo es una oportunidad de entendimiento en las criaturas y oportunidad de transfusión de fluidos. Cuando dos criaturas se aman verdaderamente, a través del sexo y del acto sexual, ellas se transfunden las vibraciones psico-físico-espiritual de que son portadoras y dan y reciben energías extraordinarias para la marcha de la vida.”
Hay dos fuentes poderosas de energía: la mental y la sexual.
Dios, en su sabiduría determinó que el potencial del sexo se construyese de extraordinaria y poderosa fuerza, de modo a que el hombre no se desinteresase de su creación, y quedase interrumpida la posibilidad de evolución espiritual.
Las grandes pasiones y las grandes cóleras son descargas electromagnéticas de altísimo voltaje que ponen en riesgo todo nuestro aparato periespiritual.
Los fundamentos del sexo son puramente espirituales, no hay memoria  del inicio de la creación sexual, pero fue construcción espiritual.
El sexo esta íntimamente ligado al sistema neuro-espinal, con repercusión directa en los campos de los órganos periespirituales de comunicación, como en el caso de la pituitaria. El desgaste sexual conduce normalmente a la persona y al Espíritu a la infelicidad. Es una actividad que alcanza directamente al cerebro e hiere o afecta profundamente al periespíritu.
Nos dice el mismo Espíritu de luz; “Que la peor de las obsesiones, es la de índole sexual, porque tiene  la dulzura de la miel, ya que hay placer en el asunto (Espíritu, Eleuterio). Aunque constituya para nosotros, Espíritus endeudados, una conmoción emocional, debemos admitir que, no sólo se practica el sexo en la Tierra, sino en los planos espirituales inferiores, donde, Espíritus abnegados, trabajan para orientar a estos hermanos a la reforma íntima, a la renovación mental. Son muchos los que se transfieren de un mundo para otro por la ley de afinidad, sintonizando en la misma faja vibratoria y con los mismos propósitos: saciar el hambre de sexo.
Un día, gracias a la libertad que Dios concede al hombre, aunque relativa, ya que el hombre conquista la verdadera libertad con el progreso y el amor, los Espíritus encadenados a estos desequilibrios, por la práctica exagerada del sexo, se saturaran, se cansaran y comenzará la modificación. El trabajo redentor y la ascensión a planos más elevados. Estamos llamados a ser perfectos, aunque eso nos cueste dolor y muchos milenios.
Por último citar unas palabras del Apóstol Pablo: “Yo tengo en la carne un espino que me fue dado por Satanás (espíritus inferiores) para abofetearme.”

                                                         Isabel Porras 

martes, 2 de abril de 2013

FENELÓN


1651 - 1715
EXPONENTES DE LA CODIFICACIÓN

Este es el nombre literario de François de Salignac de la Mothe, prelado y escritor francés que nació en el castillo de Fenelón, en Périgord, el 6 de agosto de 1651.

Se ordenó sacerdote en 1675 y pasó a dirigir una institución que tenía por objetivo reeducar a los jóvenes protestantes convertidas al catolicismo.

Fue enviado por el rey, en calidad de misionero a las regiones de Aunis y Saintonge.

Su Tratado de educación de los jóvenes, que vio la luz en 1687, obra dedicada a las hijas del duque de Beauvillier, le valió la nominación de preceptor del duque de Bourgogne.

A los 42 años es electo académico y a los 44 arzobispo de Cambrai.

A partir de la publicación de su obra Explicación de las máximas de los santos, en 1697, pierde las gracias oficiales. Dos años más tarde, la Santa Sede condena la obra y él es privado de sus títulos y pensiones.

También cae en desgracia ante Luís XIV que descubre críticas a su gobierno en el romance pedagógico de Fenelón “Las Aventuras de Telemaco”, en el mismo año de 1699. Así mismo en el exilio de su diócesis, no para de publicar. Y en el período de 1700 a 1712 publica Fábulas y Diálogos de los muertos, este último escrito para el duque de Bourgogne.

Deja transparecer su esperanza de una reforma política en "El examen de conciencia de un rey", en cuanto su apego a la Antigüedad clásica transparece em Cartas sobre as ocupações da Academia francesa.

Desencarna el 7 de enero de 1715, en Cambrai.

Fenelón figura en la Codificación, en varios momentos, de la cual podemos citar: "El Libro de los Espíritus", donde realiza el Prolegómenos, junto a una pléyade de luminarias espirituales. Igualmente la respuesta a la pregunta Nº 917 es de su responsabilidad.

En "El Evangelio según el Espiritismo", se presenta en varios momentos, disertando acerca de la Tercera Revelación y de la revolución moral del hombre (cap. I, 10); el hombre de bien y los tormentos voluntarios (cap. V, 22,23); la Ley de Amor (cap. XI, 9); el odio (cap. XII, 10) y empleo de la riqueza (cap. XVI, 13).

En "El Libro de los Médiums" figura en el capítulo de las Disertaciones Espíritas (cap. XXXI, 2ª parte, ítems XXI y XXII) desenvolviendo aspectos acerca de las reuniones Espíritas y la multiplicidad de los grupos Espíritas.

Es importante señalar, que los aspectos anotados son los que el Espíritu dio  su nombre, debiéndose considerar que debe, como los demás responsables espirituales de la Codificación, haber estado presente en muchos otros momentos, dando su especial contribución, en las que fue convidado por el Espíritu de Verdad a componer su equipo, en tan grandioso emprendimiento.

EL FLUIDO COSMICO UNIVERSAL


                               

                          
Dios es la inteligencia suprema, causa primera de todas las cosas, es decir que Dios es la causa de todo cuando existe. Todo este universo toda esta creación es fruto de Dios. Partiendo desde aquí y aclarado este punto, consideramos que nuestro universo material que conocemos todos los seres humanos por medio de nuestros sentidos y por medio de la ciencia, está sujeto al concepto de lo que nosotros percibimos por nuestros sentidos corporales.
 No quiere decir que tan solo exista en este universo este tipo de materia, ya que nuestros sentidos están limitados y no podemos ver otros estados de la materia que desconocemos. Albert Einstein ya dijo que lo que nosotros consideramos materia no es más que enormes cantidades de energías condensada, lo que nosotros percibimos como solido, liquido o gaseoso no son más que diferentes densidades de esa energía.
 La materia en si no existe, tan solo es un concepto del intelecto ya que lo que verdaderamente existe son concentraciones de energías a diferente niveles de densidad y vibración. Nuestros ojos solo pueden recibir frecuencias entre el rojo y el violeta, pero mas allá del violeta existen vibraciones que nuestros ojos no pueden captar, al igual que por debajo del rojo, también existen vibraciones que nuestros ojos tampoco pueden ver, el infrarrojo nuestros ojos no lo puede ver pero ello no significa que no exista por el mero hecho de no verlo.

Si hacemos la comparación con nuestro oído tenemos exactamente lo mismo, nuestro oído no puede percibir sonidos cuya frecuencia este por debajo de los 20 Hz,  al igual que no podemos oír frecuencias que estén por encima de los 20000 Hz, es decir no podemos escuchar los infrasonidos ni los ultrasonidos, pero eso no significa que no existan. Muchos animales tienen los sentidos más desarrollados y pueden escuchar todo estas frecuencias. Igualmente estamos rodeados de ondas electromagnéticas de radio, tv, o fenómenos como el magnetismo que tampoco somos capaces de ver.
Ahora centrándonos ya en la materia, mucho antes de que Einstein dijera sus teorías, Allan Kardec había preguntado a los espíritus sobre la naturaleza de la materia. A lo cual los espíritus respondieron que el origen de la materia estaba en un fluido cósmico universal también llamado materia cósmica primitiva y que a raves de las modificaciones o manipulación de ese fluido cósmico universal surgirían toda una variedad de sustancias químicas o elementos químicos que existen en la actualidad.
Ya Allan Kardec en el libro del génesis dijo:

Hay un fluido eterno que llena el espacio y penetra en todo los cuerpos. Este fluido es el éter o materia cósmica primitiva que es el generador de mundos y de todos los seres.
Esto quiere decir que este fluido cósmico universal llena todo el universo y este fluido se transforma por medio de una ingeniería superior en la materia tal cual la conocemos actualmente. Lo que nosotros llamamos materia no es más que fluido cósmico universal manipulado de forma inteligentemente. Y a su vez esta materia con el tiempo volverá a ser fluido otra vez de nuevo en un ciclo eterno. Entre  los fluidos cósmicos universales y la materia hay niveles de fluidos de menor densidad a mayor densidad, la naturaleza no da saltos, todo se produce de forma gradual y escalonada en orden perfecto.
 Estos fluidos más sutiles que se encuentran entre el fluido cósmico universal y lo que llamamos materia forman el mundo invisible de los espíritus. Aunque esos fluidos sutiles no seamos capaces de verlos porque están fuera del alcance del ser humano que todavía no tiene desarrollado esos sentidos por su nivel espiritual más bajo. Para los espíritus este es su mundo natural y cotidiano, para ellos esta es su realidad, tan real y física como puede ser la nuestra para nosotros y en esta realidad viven.
Los fluidos del mundo de los espíritus pueden ser manipulados igual que nosotros manipulamos los nuestros, nuestra llamada materia tiene unos límites que van desde los elementos más densos como el plomo, uranio o a los menos densos como el gas o el plasma. En el mundo espiritual existen los mismos fluidos más densos y fluidos menos densos. Igual que nosotros podemos manipular nuestra materia que es un tipo de fluido para construir casas, coches, maquinaria, tecnología de todo tipo, ellos también pueden hacer lo mismo, manipulando los fluidos de su mundo.

Al igual que aquí hacen faltas ingenieros y técnicos especialistas para crear todas estas cosas, allí también se necesitan conocimientos e ingenieros capaces de manipular todo esto, a un nivel muy superior al nuestro aquí en la tierra. Si en lo que aquí llamamos materia existen protones, neutrones, electrones y demás partículas subatómicas allá en el mundo espiritual también existen con otro tipo de vibración más sutil. Aquí ponemos un ejemplo aclaratorio de todo esto:
Si un hombre fuese hecho de humo, no tendría necesidad de sentarse en una silla de madera; mientras tanto, bajo la ley común de la reacción entre sustancias iguales, se sentaría con más facilidad en otra silla que fuera construida de humo. Por esa causa, si el suelo, las cosas, los seres y todo lo que constituye nuestro mundo, son hechos de la misma sustancia, su vida de relación, también transcurre, lógicamente, como la vida de la Tierra. Es conveniente que sepáis, que la vida astral es mucho más intensa y dinámica que la vida en la Tierra, porque nosotros actuamos en la materia quintaesenciada, que además de ser más rica en reproducción vibratoria emotiva, nos ofrece un elevado padrón de belleza, dotado de pintoresca y encantadora luminosidad interior.
 Es preciso que imaginéis al espíritu desencarnado como si se moviera en un ambiente material sutil, del mismo modo, que veis al hombre carnal moviéndose dentro del pesado ambiente del mundo terreno. El hombre, por ser portador de un cuerpo material, toca, palpa, o manosea perfectamente su vestido, su zapato o su alimento, que son hechos de sustancias materiales.

 Del mismo modo, pero bajo otra modalidad vibratoria, el espíritu desencarnado, con su cuerpo hecho de sustancia magnética, puede sentarse en una silla etérica, vestir ropa etérica  o ingerir frutas etéricas. Por eso cuando soñamos o estamos en el desprendimiento no sabes muchas veces distinguir si estamos en el cuerpo físico o estamos en el plano astral, ya que las sensaciones son las mismas que en el cuerpo físico, a excepto ciertos detalles que que hay que ver de forma consciente, donde se vería la diferencia entre el plano físico o el astral, como por ejemplo la posibilidad de flotar o viajar rápidamente o atravesar la materia.
Este fluido cósmico universal transformado o manipulado da lugar al fluido vital, este fluido vital se une a la materia y le da la vida. Todos los seres humanos nacen con una cantidad de este fluido vital suficiente para la vida, aunque todo depende también de la cantidad que traigamos al nacer, o la administración que nosotros mismos haga de esos fluidos mirando por ellos y no derrochándolos. Cuanto mayor fluido vital tengamos más vitalidad tendremos, cuando el fluido vital se agota la vida también se va agotando dando paso a la enfermedad.
 Este fluido vital se puede reponer por medio de la absorción o asimilación de las sustancias que lo contienen. Debemos decir que este fluido siempre fluye del nivel más alto al nivel más bajo, y que puede ser transmitido por los seres humanos. El ser humano que tiene más fluidos puede dar al que tiene menos fluidos, muchas veces de forma inconsciente o por proximidad estos fluidos son transmitidos, por personas jóvenes o niños a personas ancianas nada mas por la proximidad entre los peri espíritus  que más adelante explicamos. También se puede transmitir estos fluidos de forma voluntaria y consciente para dar fluidos a personas que necesitan de ello, es como si estuviésemos cargando una batería. Las personas sanas pueden dar  fluidos a las personas enfermas.
Todo esto se empezó a estudiar en el siglo XVlll con Antón Mesmer al que se le llamo magnetismo animal o memerico. El pase espirita tiene dos objetivos que es actuar sobre el campo espiritual y el material. El pase de fluidos busca el reequilibrio orgánico, psíquico ,periespiritual y espiritual del necesitado.
Los seres humanos tienen un cuerpo fluidico a su alrededor, un envoltorio que es una condensación del fluido cósmico universal que se llama periespiritu, el mismo cuerpo físico es una condensación de ese fluido aun mayor, de mas densidad, que le da ese aspecto tangible y físico. Ambos son materia aunque de diferente sutilidad. Este fluido toma la forma del mundo en que se habita, de ahí que sea diferente en cada mundo. Al pasar de un mundo a otro el espíritu cambia su envoltura. El periespiritu es el intermediario entre el espíritu y el cuerpo, pasando información desde el cuerpo físico a través del periespiritu al espíritu o al contrario pasando información desde el espíritu a través de periespiritu al cuerpo físico. Como los mundos varían con su grado de evolución el periespiritu necesita adaptarse a ese grado de densidad del fluido. La condición moral influye en el periespiritu, a mayor evolución espiritual menor es la densidad del periespiritu y a mayor inferioridad mayor densidad del peri espíritu.
 En los mundos inferiores el periespiritu es muy denso y pesado por eso al desencarnar vamos acorde a lo grosero que sea nuestro periespiritu. Es como un globo lleno de Helio que flota hacia arriba, pero si lo llenamos de gases más pesados se irá para abajo.

Debido a la densidad de la materia los espíritus no pueden acceder a ella, tienen que hacerlo a través del periespiritu, es por medio del periespiritu que los espíritus actúan sobre la materia produciendo los fenómenos mediumnicos, por medio de la voluntad del espíritu, donde pueden producir golpes, ruidos o movimientos de objetos.
Muchas veces los espíritus se hacen visibles gracias a las modificaciones de los fluidos del periespiritu.
Lo que vemos no es al espíritu en sí, si no lo que vemos es su periespiritu.
Unas de las propiedades del periespiritu  es que puede recorrer enormes distancias con el pensamiento y la voluntad, al igual que pueden penetrar cualquier materia solida, en los sueños y en la desencarnacion nos movemos con el periespíritu.
 Este periespíritu está formado por una serie de capas exteriores que rodean al periespiritu según el grado de desarrollo del espíritu. El periespiritu es flexible y se puede adaptar a cualquier forma según la voluntad del espíritu y su grado de evolución. En el periespiritu podemos encontrar 7 centros vitales de energía llamados chakras, que serian el coronario situado en la cabeza, el frontal situado en la frente, el laríngeo situado en la garganta, el cardiaco, el umbilical, el esplénico y el genésico.Estos centros imprimen energía a las células del cuerpo que son verdaderos laboratorio a las ordenes del espíritu haciendo que todas las funciones del cuerpo funcionen adecuadamente.
En las transfusiones fluidicas siempre se realizan de periespiritu a periespiritu. Muy parecidas a las
transfusiones de sangre, cuanto más sutilizados sea nuestro periespiritu de mejor calidad serán nuestros fluidos que podremos donar, porque si nuestro periespiritu es muy grosero muy denso, está claro que en vez de donar fluidos limpios estaremos contaminado el periespiritu de la otra persona, igual que si lo hiciéramos con una transfusión de sangre contaminada.
El periespiritu o cuerpo fluidico es uno de los productos más importantes del fluido cósmico, ya que nos sirve y servirá como cuerpo para después de la muerte física. Cuanto más elevado sea nuestro periespiritu, cuanto más sutil sea, mejor podremos nosotros entrar en contacto con espíritus elevados.